Reciclado y reacondicionamiento de equipos electrónicos para una economía circular
El área de recursos humanos forma parte del núcleo de la operativa de AfB Group. Esta fue la primera función que asumió Yvonne Cvilak, su consejera delegada, cuando se incorporó a la empresa en 2012. AfB Group, fundada en 2004 por Paul Cvilak, el padre de Yvonne, es una empresa de tecnologías de la información con una misión social. Se hace cargo de equipos informáticos usados, elimina de forma segura los datos almacenados en ellos y los reacondiciona para su reventa, contribuyendo a la economía circular en el proceso. La empresa se define asimismo por su política de contratación inclusiva, que hace hincapié en contar con personas con discapacidad en su plantilla.
Hoy en día, AfB Group es la mayor empresa de tecnologías de la información sin ánimo de lucro del mundo. Ha pasado de tener 10 empleados en un único centro a contar con cerca de 700 repartidos por 20 centros de cinco países europeos, y trabaja con más de 1.600 empresas y organismos públicos. Aproximadamente la mitad de sus empleados tienen algún tipo de discapacidad física o mental. Al principio, la respuesta al concepto de AfB Group era el escepticismo. "En los inicios, mi padre tuvo dificultades para encontrar inversores", afirma Cvilak, "pero no se desanimó, demostró valentía, innovación, y además invirtió a título personal a fin de materializar su visión". El mercado global de los artículos electrónicos reacondicionados está valorado en 86.000 millones de dólares y se prevé que alcance los 168.000 millones de dólares en 2029.
Yvonne Cvilak, Directora general de AfB Group. (Imagen cortesía y copyright de AfB GmbH)
AfB presta sus servicios en múltiples niveles. Tras recibir los equipos informáticos, elimina los datos de forma segura. Los dispositivos se reacondicionan y se revenden al sector B2B, o se asignan para su venta a consumidores mediante una red de 13 tiendas locales, una tienda virtual y otras plataformas online; desde su fundación, ha vendido más de 1,2 millones de portátiles reacondicionados. Si el dispositivo no se puede reparar, las piezas se reciclan para recuperar materias primas. Las empresas y los organismos públicos que entregan sus equipos usados reciben documentación en la que se confirma qué recursos se han ahorrado mediante la reutilización. "Estas características únicas, junto con una excelente relación precio-rendimiento y la elevada calidad del servicio, nos permiten competir con éxito frente a otros proveedores", señala Cvilak. Asimismo, la misión de AfB –como empresa tecnológica "social y verde"– le ha permitido forjarse un espacio particular dentro del mercado de reacondicionamiento de equipos tecnológicos en general, ayudándole a crear una comunidad de clientes solidaria a largo plazo.
Cvilak reconoce que su estilo de gestión en AfB es diferente al de su padre, centrándose en enfoques innovadores y nuevas tecnologías, así como en llevar la empresa a nuevos lugares. "Ahora, nuestro enfoque está en optimizar nuestros procesos, en los que la digitalización y la IA desempeñan un papel clave", afirma. Sigue haciendo mucho hincapié en defender la cultura empresarial inclusiva y diversa de AfB, "y en adaptar continuamente nuestro modelo de negocio y nuestra cultura de liderazgo a las cambiantes necesidades del mercado".
Desde su fundación, la empresa ha vendido más de 1,2 millones de ordenadores portátiles renovados. (Imagen cortesía y copyright de AfB GmbH)
Cvilak mide el impacto en AfB por medio de diversos parámetros. Uno de ellos es el número de personas con discapacidad que contrata: un objetivo clave es crear 500 puestos de trabajo para personas con discapacidad. También estudia con mucho detenimiento su impacto ambiental. La tasa de reutilización –los dispositivos que pueden tener una segunda vida– es particularmente importante, como lo es el ahorro energético en comparación con el gasto en la producción de nuevos dispositivos. En 2023 AfB procesó 666.000 dispositivos informáticos y móviles, retornando un 70% al mercado. "De esta manera, contribuimos activamente a alargar el ciclo de vida de los dispositivos", indica Cvilak. "Los dispositivos restantes se reciclaron profesionalmente para recuperar materias primas y, en comparación con el supuesto de nueva producción, este proceso de reciclado contribuyó al ahorro de 66.000 toneladas de CO2 y 480 millones de litros de agua, entre otras cosas". Para Cvilak, esto no solo refuerza su perfil en el mercado, sino que además posiciona a AfB como un socio valioso para las empresas que quieran cumplir las directivas de presentación de información sobre sostenibilidad por parte de las empresas (CSRD).
Aunque AfB esté creciendo, los valores familiares siguen incorporados a su funcionamiento. Su hermana también trabaja en la empresa, y muchos de los empleados llevan en ella desde el principio. "Conozco a algunos de mis compañeros de trabajo desde hace más de 20 años", dice Cvilak. "Eso también refuerza el vínculo entre todos los empleados". No es que fuera inevitable que Yvonne terminara dirigiendo la empresa, pero está orgullosa de hacerlo. "Sucedió poco a poco", comenta. "Y estoy contenta con ello".
AfB se define por su política de contratación inclusiva, que hace especial hincapié en la incorporación de personas con discapacidad a la fuerza laboral (Imagen cortesía y copyright de AfB GmbH)
Yvonne Cvilak
AfB es fundada por el padre de Yvonne, Paul Cvilak, en el sur de Alemania, empezando con 10 empleados.
Se licencia en Administración de Empresas por la Universidad Estatal Cooperativa de Baden-Württemberg (DHBW).
Se incorpora a la empresa de su padre como directora de recursos humanos.
Asciende al puesto de consejera delegada de AfB, centrándose en enfoques innovadores y nuevas tecnologías, y expandiendo la empresa a nuevos lugares.
AfB procesa 666.000 dispositivos informáticos y móviles, retornando un 70% al mercado, y contribuyendo al ahorro de 66.000 toneladas de CO2 y 480 millones de litros de agua.
La empresa ha crecido hasta contar con 660 empleados repartidos por 20 centros de cinco países europeos, y desde su creación ha vendido más de 1,2 millones de portátiles reacondicionados.